
La rigidez relacionada con el deporte y los golpes disparan respuestas que intensifican el dolor. Pero el dolor no sólo lo sienten los atletas. Hay muchas situaciones diarias que causan dolor muscular que, si no se tratan, pueden incluso afectar los tendones y ligamentos. Aquí te dejamos algunas de las causas más comunes del dolor muscular:
- Mala postura: sentarse en una posición incorrecta durante horas o levantar objetos pesados de forma inapropiada.
- Movimientos repetitivos: en el trabajo, en el jardín, al usar una computadora o en cualquier actividad del día a día.
- Estrés: cuando se originan tensiones por estrés principalmente originan dolor de hombros, dolor en el cuello o dolor de cabeza por presiones y estrés de la vida diaria.
¿Cómo puedo aliviar el dolor muscular?
Aquí te presentamos algunos consejos preventivos que pueden ayudar a evitar el ciclo que produce y mantiene el dolor corporal / muscular:
- Realiza alguna actividad física y gradualmente hace más ejercicio, de acuerdo con tu capacidad y estilo de vida.
- Hace calentamiento antes del ejercicio: algunos ejercicios que podes llevar a cabo son trote lento de 10 a 15 minutos o caminata estática.
- Realiza estiramientos musculares después de hacer ejercicio.
- Dormí lo suficiente de acuerdo con tus necesidades: el buen sueño en un ambiente tranquilo es esencial.
- Toma las medidas necesarias para reducir el estrés, tales como ejercicios de respiración, meditación o yoga, el estrés puede ser una causa del dolor tensional en cuello o en los hombros.
- Cuando aparece el dolor, Tabcin®, uno de los analgésicos más estudiados, puede ayudarte a aliviarlo.
¿Cómo puedo prevenir el dolor muscular?
Para prevenir el dolor muscular, es importante tomar medidas que ayuden a evitar lesiones que pueden causar molestias, reduciendo así las posibilidades de sufrir daños durante actividades deportivas o en la vida diaria.
Algunas de estas acciones para prevenir lesiones, y, por lo tanto, el dolor muscular, incluyen:
- Calentar antes de hacer ejercicio: si haces ejercicio o alguna actividad deportiva, calentar los músculos ayuda a activarlos al aumentar el flujo sanguíneo que reciben. El calentamiento consiste en hacer versiones ligeras de ciertos ejercicios, a modo de ir preparando los músculos para la actividad deportiva.
- Beber agua: además de hidratarnos, ayudará a nuestro cuerpo a controlar su temperatura y a relajar las articulaciones. Si no tomas agua, podes llegar a presentar con mayor facilidad calambres musculares, fatiga o mareos.
- Evitar episodios de estrés: en periodos de estrés pueden aparecer dolores musculares, ya que es un factor desencadenante de dolor tensional en cuello y hombros.
Acciones para evitar que el dolor muscular aparezca después de realizar actividades, ya sean deportivas o que hayan generado tensión muscular en el cuerpo:
- Relajación y estiramiento: Relajar y estirar después de la actividad física es fundamental para reducir la tensión muscular, mejorar la circulación y prevenir lesiones. Estos procesos ayudan a devolver los músculos a su estado normal, promoviendo una recuperación más rápida y aumentando la flexibilidad a largo plazo. Además, favorecen la relajación general del cuerpo, disminuyendo la probabilidad de rigidez o dolor post-entrenamiento.
- No exceder los límites del cuerpo: un mal hábito que se puede tener es llevar al cuerpo más allá de los límites saludables. Lo importante es mantener un progreso constante, aunque este pueda ser algo lento. De esta forma evitaremos lesiones.
- Descansar y relajar los músculos: después de la actividad deportiva es importante el descanso completo.